Oímos la palabra Ciencia muchas veces a lo largo de la semana. Pero seguramente no somos capaces de darnos cuenta de verdad de lo presente que está la ciencia en nuestras vidas. Y, en realidad, todo lo que nos rodea, la televisión, el ordenador, tu móvil, la comida de cada día o la silla en la que te sientas ha sido hecho gracias a la ciencia. Por suerte, entender su importancia es tan sencillo como interactuar con algunos de los objetos más cotidianos de nuestras vidas. Con estos objetos se pueden hacer experimentos sorprendentes que muestran cómo algunos conceptos científicos básicos se aplican al día a día y que no son ajenos ni propios sólo del mundo científico, sino de cualquier persona.

 

Tensión superficial en un bote de cristal

Un sencillo pero revelador experimento concierne a la tensión superficial. Para ello solo hace falta un bote de cristal y una media. Colocando la media sobre la boca del bote y sujetándola con elástico, bien apretada, podemos hacer pasar a su través un poco de agua normal y corriente. El agua pasa sin problemas hacia el interior. Pero, ¿qué pasa si intentamos que vuelva a salir de la misma manera? Si lo hacemos con cuidado descubriremos que el agua no se derrama ni pasa por la boca del bote, al igual que al comienzo del experimento.

 

Este truco, que más parece un truco de magia, se aprovecha de una cosa llamada tensión superficial. Ésta se crea debido a la propia naturaleza del agua y a la fuerza que ejercen unas moléculas sobre otras.

"La fuerza de las moléculas que ejercen desde "abajo" no es compensada por el aire que empuja desde fuera...."

 Al final, las moléculas crean una capa "más fuerte" y estable. Si la media es muy tupida y los huecos que dejan son pequeños, el agua se adhiere a las hebras de la tela, creando una tensión superficial esos huecos. 

 

De esta manera las propias gotas de agua impiden que el resto del líquido pase a través de ella, creando una especie de tapón. La tensión superficial es un fenómeno muy importante para la vida de los animales y las plantas, y podemos verla todos los días en acción al mirar a algunos insectos caminar sobre el agua o cuando tratamos de evitar que se derrame el líquido de un vasos.

 

 

La súper absorción de los pañales

Otro objeto fácil de encontrar en casa y que, además, contiene muchos conceptos científicos en su producción es un pañal. Aunque parezca mentira, los pañales son fruto de muchas investigaciones, algunas de las cuales todavía siguen hoy día. Para verlo, solo hay que abrir un pañal por dentro. Al observarlo comprobaremos que se componen de un polvo blanco y seco. Éste está constituido normalmente por una mezcla de poliacrilato de sodio.

 

El poliacrilato es capaz de absorber una gran cantidad de líquidos ocupando casi el mismo espacio.

 

"También es capaz de aumentar su volumen hasta mil veces si se le agrega agua destilada"

Razón a la que se debe el hecho de que pueda absorber tanto líquido sin apenas variar en tamaño. Aprovechando esta propiedad se pueden hacer numerosas manifestaciones artísticas. Y es que podemos añadir colorante alimentario o témperas a una mezcla de agua para humedecer, más tarde, el poliacrilato, que se quedará con una textura gelatinosa.

 

A esta textura se le conoce en el mundo coloquial como "nieve artificial". Si dejamos secar la nieve, al final, volverá a ser un polvillo blanco o coloreado. El poliacrilato no es tóxico al contacto, aunque puede ser un poco molesto cuando está muy seco. Pero una vez humedecido sirve para hacer estupendas manualidades. Y el efecto super absorbente es impresionante. Qué menos para la cantidad de investigación que lleva tras de sí.

 

Termodinámica en la laca para el pelo

Pero, probablemente, los experimentos más llamativos son aquellos que implican a una combustión. Uno de estos solo necesita laca para el pelo y jabón, con un poco de agua, para mostrar algunos efectos de la termodinámica y física de fluidos. Lo que se puede hacer es atrapar un gas dentro de una burbuja aprovechando la tensión superficial de la que hablábamos antes. Lo que vamos a hacer es preparar en un cuenco grande con agua y jabón líquido lavavajillas bien mezclado.

 

Cuando esté listo, podemos con una pajita se insufla, es decir, se mete el gas, en el líquido, que es menos denso y no se disuelve en el agua, por lo que sube hacia arriba. En su superficie, entonces, aparecen burbujas. Ahora, si usamos un mechero veremos como las burbujas se convierten en auténticas bolas de fuego. La explicación es muy sencilla, los aerosoles contienen la mayoría de ocasiones líquidos inflamables que ayudan a mantener el líquido disuelto y a que se pueda expulsar en forma de spray. A veces son los propios productos los que son inflamables, como ocurre con la laca para el pelo, que es producto complejo orgánico. 

 

 

"El jabón forma una burbuja al mezclarse con agua y retiene al gas dentro gracias a la tensión superficial."

 

Por eso, cuando acercamos la llama se rompe la burbuja y el gas en su interior comienza a arder. Como vemos, aquí se mezclan varios conceptos fácilmente explicables así. Pues no hay nada mejor que un buen ejemplo para explicar la teoría. Y estos son solo algunos ligeros experimentos que se pueden hacer en casa. En realidad, todo nuestro hogar es un gran laboratorio. Todo depende del punto de vista desde el que veamos la ciencia.

 

 

 

Termodinámica

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