El Laboratorio de Geodinámica de Lanzarote es un referente en volcanología y cambio climático vinculado a variaciones del nivel del mar y temperatura del agua. 

Lanzarote participa desde hace 30 años en la investigación geodinámica que se desarrolla en todo el mundo. De hecho, desde hace tres décadas, el Laboratorio de Geodinámica de Lanzarote forma parte de un reconocido grupo de investigación junto a otras instituciones nacionales, como la Universidad Complutense de Madrid, o internacionales como el Institute of Seismology of Wuhan, el Observatoria Royal de Belgica, el Grupo de Geodinámica del Consejo de Europa de Luxemburgo o el Instituto de Geofísica de la Academia de Ciencias de Rusia, entre otros.
 
El LGL es una consecuencia del acuerdo entre el Instituto de Astronomía y Geodesia (IAG) y el Cabildo de Lanzarote. El LGL cuenta con tres módulos de observación permanentes situados en la Cueva de los Verdes, los Jameos del Agua y el Parque Nacional de Timanfaya. En él se llevan a cabo investigaciones en relación con la actividad geodinámica de la isla, siendo el Laboratorio de Geodinámica de Lanzarote único en su género y centro de referencia de la investigación volcanológica y del cambio climático vinculada a las variaciones del nivel del mar y de la temperatura del agua. 
 
Estos módulos de observación obtienen mediciones de alta precisión con variaciones milimétricas gracias a la ausencia de perturbaciones en el lago interior de Jameos, viento, corrientes marinas o cualquier actividad. El primer sensor colocado en los Jameos se instaló allí hace tres décadas en el marco del ‘Estudio, evaluación y modelización de fenómenos perturbadores sobre las determinaciones del nivel del mar en el LGL’, y desde entonces han sido numerosas las ocasiones en las que investigadores de todo el mundo han contactado con la Casa de los Volcanes para contrastar información o solicitar la instalación de prototipos.
 
La estación lanzaroteña ejerce funciones de laboratorio de experimentación de equipamientos. En la actualidad cinco mareógrafos diferentes están siendo chequeados en la laguna marina, un proyecto de investigación que reúne a científicos del CSIC y de las universidades de Jaén, Salamanca, Complutense de Madrid y Tecnológica de Panamá.
 
Posteriormente se han instalado dos nuevos equipos de medición del nivel y temperatura del mar, que mejorarán las prestaciones de los que ya funcionan en el módulo. Aunque las primeras mediciones se realizaron a mediados de los 80, aún deberán pasar algunas décadas para que los resultados ofrezcan cambios apreciables. Mientras tanto, los datos de los mareógrafos y termómetros instalados en Lanzarote se cruzan con los obtenidos en estaciones del resto del mundo.
 
Además del nivel y temperatura del mar, los sensores recogen otros valores de calidad del agua, como la salinidad, el nivel de concentración de oxígeno, el cloro, la turbidez o el porcentaje de anhídrido carbónico, que pueden ofrecer indicios de cambios en la actividad volcánica. 
 
Más información en: Laboratorio de Geodinámica de Lanzarote
 

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